El desierto de Cardó fue el tercer en erigirse en ámbito hispano bajo la orden de los Carmelitanos en el siglo XVI. En el siglo XIX se convirtió Balneario.
Data del siglo VII aC y se determinó como un pequeño almacén fluvial de mercaderías que contiene ámforas fenícias.
Este poblado Ibérico es uno de los más bién conservados de todo Cataluña. El asentamiento está situado en la cima de un turón rocoso, en la riba izquierda del Ebro y tiene una superfície aproximada de 1.000 m2.